Casos de caídas en vías públicas
Algunas personas sufren cada día caídas en la vía pública o establecimientos abiertos al público, con enorme riesgo para su salud e integridad física. En algunos supuestos se trata de un caso fortuito y no siempre existe una responsabilidad del titular de la vía pública o del establecimiento, pero en algunos casos dichas caídas si son consecuencia de una negligencia, imprudencia o mala señalización o mal estado de conservación de calles, edificios y establecimientos.
Como es lógico a parte de los temas legales complejos que se deben dirimir, los casos de resbalones y caídas implican lesiones que parecen «menores» al principio, pero que pueden, de hecho, causar lesiones de gravedad a lo largo de la vida y es ahí donde debe de conocer bien sus derechos frente al responsable o responsables de dichos daños.
Muchas son las opciones que las aseguradoras ponen a disposición de sus posibles clientes, a la hora de elegir el tipo de producto a contratar. El refrán «nadie da duros a pesetas«, podemos usarlo para explicar, que no es conveniente fijarse solo en el precio. Podemos estar comprando un seguro bajo de precio, que en el «momento de la verdad», es decir, cuando tengamos un accidente, la cobertura de la póliza contratada, no cumpla las expectativas de la indemnización esperada.
Es importante analizar y comparar qué nos cubre exactamente nuestro seguro, y cómo la aseguradora responderá en caso de siniestro. Nuestra indemnización, dependerá en gran medida de las garantías contratadas.
No debemos dejarnos llevar ni por exceso ni por defecto, es decir, el hecho de contar con el seguro más completo del mercado, no hacer que hagamos un uso irresponsable de este. Para ponernos en contexto pongamos un ejemplo; la garantía de todo riesgo, no debe malgastarse.
Además, si somos buenos conductores, existen productos que a menor precio, te garantizan igualmente la indemnización por siniestro, sin hacer uso de la garantía de todo riesgo pura y dura, y hablamos aquí de los seguros todo riesgo con franquicia, una buena opción para rebajar tu prima y garantizar tu indemnización y cobertura en el momento de tu siniestro.
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